Recientemente hemos hablado sobre las nuevas alternativas al botox que existen actualmente, como daxxify. Sin embargo, si aún no te convencen los tratamientos con agujas, el Emface es la solución ideal para rejuvenecer tu rostro.
¿Y cómo es posible rejuvenecer el rostro sin agujas? El Emface es un dispositivo que combina las tecnologías de la radiofrecuencia sincronizada y la HIFES (High Intensity Facial Electric Stimulation. El resultado es una mejora de la densidad y tono muscular del rostro, dos puntos clave en el camino antienvejecimiento.
Conoce Emface, el tratamiento sin agujas para combatir las arrugas y la flacidez del rostro
Las dos tecnologías que combina el Emface ayudan a estimular la producción de colágeno y elastina —lo que va a disminuir las arrugas y líneas de expresión—, además de reafirmar la piel y los músculos faciales, logrando un efecto lifting.
Durante el procedimiento de Emface se restaura y eleva el soporte de los tejidos del rostros, teniendo como resultado el aumento del tono muscular facial.
A partir de los 30 años, nuestra piel comienza a perder colágeno de manera progresiva. Cada capa de la cara vive su envejecimiento que es el responsable de la flacidez y de la piel colgante, uno de los mayores retos de la medicina estética.
Según estudios clínicos, Emface ha demostrado “un 37% de mejoría en la reducción de arrugas, un 23% de efecto lifting y un 30% de mejoría en el aumento del tono muscular” frente a otros tratamientos.
¿Es un tratamiento para prevenir el envejecimiento es para todas las edades?
Como ya hemos comentado en otras ocasiones, tratamientos como el botox o el baby botox sirven para prevenir la aparición de arrugas, especialmente en personas menores a 35 años. En el caso de Emface, este es efectivo para todas las edades dependiendo del objetivo que tengas en cada etapa de tu vida.
Si estás entre tus 20 y 30, lo puedes utilizar para prevenir el envejecimiento del rostro, mientras que si ya pasaste los 40 años, también lo puedes usar como un tratamiento para mantener la piel y los músculos firmes, combinando con otros tratamientos.
¿Cuántas sesiones se recomiendan?
Los beneficios de Emface comienza a notarse desde la primera sesión, mostrando mejor textura y una piel más luminosa. Sin embargo, para obtener los resultados deseados se requieren de al menos entre 4 o 6 sesiones al año, con una semana de descanso entre cada una. Dependiendo del nivel de flacidez del paciente, serán suficientes para mantener la estructura muscular de la cara.
Al ser un procedimiento indoloro, no se necesita tiempo de recuperación porque no presenta efectos secundarios como hematomas ni enrojecimiento de la cara. El efecto lifting puede notarse de inmediato.
¿Cómo es el procedimiento de Emface?
Al paciente se le aplica un parche en la frente y en las mejillas para activar la radiofrecuencia para estimular los músculos frontales —los que levantan las cejas—, los cigomáticos mayor y menor —los de la sonrisa— y el risorius —los de las mejillas—. La sensación es de un leve hormigueo durante unos 20 minutos, este podría ser algo incómodo para algunos pacientes sentir cómo se contraen los músculos.
Emface y botox, diferentes pero compatibles
Si bien el Emface se presenta como una alternativa no invasiva al botox no quiere decir que no puedan combinarse como tratamientos para combatir los signos del envejecimiento. Es ideal para las personas que le tienen miedo a las agujas o que tal vez no son compatibles con la fórmula del botox.
Mientras que los rellenos disminuyen la apariencia de las arrugas desde adentro hacia afuera, Emface lo hace de afuera hacia adentro. Su combinación de tecnología es un enfoque novedoso que abre las posibilidades de un camino hacia el antienvejecimiento fresco y diferente.
Lo más importante es un envejecimiento digno, no importa cuál tratamiento elijas
Es de conocimiento popular que los rellenos son una opción que no todo el mundo elige por miedo a no obtener un resultado natural, y lo cierto es que esto no es culpa del botox ni de la fórmula, sino de quien lo aplica. Todo tratamiento estético debe tener el acompañamiento de un profesional que guíe el procedimiento para obtener los mejores resultados posibles.
La novedad del Emface es que permite alcanzar los objetivos de antienvejecimiento de una manera más segura y natural para los pacientes. No importa cuál elijas, lo más importante es guiar el tratamiento bajo un enfoque digno y que se ajuste a los rasgos reales del paciente.
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