Si buscas un tratamiento no quirúrgico para mejorar la apariencia de tu piel, es posible que hayas oído hablar de los bioestimuladores de colágeno. Estas sustancias inyectables, como su nombre indica, estimulan la producción de colágeno en la piel, mejorando su firmeza, elasticidad y luminosidad.
Uno de los bioestimuladores de colágeno más populares en la actualidad es Radiesse, y en este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber sobre él.
¿Cómo funciona un bioestimulador de colágeno?
Con el paso del tiempo, la producción de colágeno disminuye, lo que puede provocar la aparición de arrugas, flacidez y otros signos de envejecimiento en la piel.
Para combatir este proceso natural entran en juego los bioestimuladores, unas sustancias cuyos componentes actúan como “andamios” la estimulación de colágeno por parte de las células de la piel.
Con el tiempo, la piel se vuelve más firme, elástica y luminosa, lo que se traduce en una apariencia más joven y saludable. El bioestimulador de Radiesse está compuesto por hidroxiapatita de calcio y carboximetilcelulosa.
Las microesferas de hidroxiapatita cálcica producen una respuesta inflamatoria que desencadena el proceso de estimulación de colágeno, mejorando la firmeza y elasticidad de la piel. Por su parte, la carboximetilcelulosa actúa como vehículo para transportar las microesferas de hidroxiapatita cálcica.
En resumen, activa la formación del colágeno mediante la estimulación de la fabricación de los fibroblastos. Se aplica con una aguja punta roma para minimizar el dolor y no dañar la piel del paciente.
¿Quién puede beneficiarse de este procedimiento?
Este tipo de bioestimulador de colágeno está indicado para pacientes que desean definir y hacer lifting en su rostro, sin recurrir a cirugía. Dado que no aporta volumen ni estructura, los pacientes que buscan un efecto de rejuvenecimiento, se recomiendan otros bioestimuladores de colágeno, como el ácido hialurónico.
Y hablando de ácido hialurónico, si te preguntas si es mejor o si sus resultados son menos efectivos que los del bioestimulador de colágeno, la respuesta es que ninguno es mejor que el otro. Ambos tienen objetivos específicos y trabajan de la mano para lograr los mejores resultados, dependiendo de las necesidades de cada paciente.
Para desafiar los signos del envejecimiento
La aplicación de bioestimuladores de colágeno ayuda a combatir la aparición de signos del envejecimiento como las arrugas y líneas de expresión, no solo del rostro, sino también en otras zonas del cuerpo como los brazos y piernas y también en las manos y en el cuello.
Estas últimas áreas son muy importantes para los tratamientos de rejuvenecimiento, ya que son los que más delatan el paso del tiempo. Al estimular el colágeno, la piel gana luminosidad, firmeza y brillo natural.
Además de rejuvenecer, los bioestimuladores también pueden “levantar” ciertas zonas del cuerpo como el abdomen, precisamente para reducir la flacidez y aportar más soporte.
Como nota importante debemos destacar que los bioestimuladores no se pueden aplicar en la frente, ojos, nariz, labios ni mentón. La razón es que estas zonas son muy sensibles y delicadas, y la aplicación podría causar efectos secundarios no deseados, como inflamación, dolor, hematomas o incluso infecciones.
¿Cuánto duran los resultados de este tratamiento?
Los efectos de la aplicación de bioestimuladores para generar colágeno pueden durar entre 12 a 18 meses, dependiendo del estado de la piel. Para comenzar a ver los beneficios el proceso es relativamente lento, pero 100% garantizados.
Los resultados pueden tomarse un aproximado de tres meses en aparecer. Esto se debe principalmente a que el procedimiento ayuda al cuerpo a producir colágeno de forma natural, el cual es un proceso que tarda 90 días. No es inyectar colágeno directamente, por eso los resultados tardan en llegar.
¿Qué debo tomar en cuenta después de la cita?
Después de la aplicación de los bioestimuladores, es importante seguir estas recomendaciones para asegurar un buen resultado y evitar efectos secundarios no deseados:
- Evitar actividades que generen o requieran calor —como saunas o baños turcos, también las terapias láser— ni cualquier proceso que cause vasodilatación.
- Evitar el ejercicio vigoroso durante 1 o 2 días después de la sesión.
- No bañarse en piscinas ni en el mar para evitar riesgos de contaminación e infección.
- No frotar ni masajear la zona tratada para evitar la aparición de morados y hematomas.
- Bebe suficiente agua para mantener la piel hidratada.
- Se recomienda el uso de protector solar todos los días para proteger la dermis.
Bioestimuladores de colágeno: ideales para lograr un efecto lifting natural
Los bioestimuladores de colágeno son una opción popular y efectiva para mejorar la apariencia de la piel sin recurrir a cirugía. En Iki Skin Experts contamos con este novedoso tratamiento y estaremos contentos de atender tus dudas. Si este es un procedimiento que quieres, te invitamos a agendar una valoración gratuita para conocer el mejor tratamiento para tu caso.